domingo, 29 de diciembre de 2013

Fuiste real...

Porque nunca fuiste una mentira, un sueño vacío, o una fantasía.
Porque nunca fue rápido, sino despacio saboreando palabra a palabra, llamada a llamada.
Porque fue creciendo despacio, sin prisa.
Porque cuando más ansiosa me sentía, desorientada, intentando aferrarme a lo primero que pasó, creando una mentira en mi mente (por puro temor), lo empecé a asumir.
Las fantasías que crea la mente, pueden ser fuertes y hasta parecer reales, pero lo único que lo diferencia de la realidad es el SENTIR.
Y de eso no hay duda. Porque no hay temor.
Y cada día lo repito:" te ha rechazado y no pasa nada", para saber donde estoy y, aún y así, sigo sintiendo lo mismo...
Y al final, haces las paces contigo misma, y dejas de explicar a quién ya no te quiere creer, por mucho que expliques.
Creo que poco más puedo hacer, porque ni una oportunidad de demostración he tenido.

Pero es igual, porque sigo sintiendo lo mismo...

Y avanzo en mi camino de aprendizaje de mi sumisión, pero sin querer, ni buscar nada fuera de mí.

Porque a ti te deseaba, no te necesitaba....

No me digas que fue un sueño...

martes, 17 de diciembre de 2013

También puedo reír, aunque me duela.....

Porque me lo debo a mí, a mi propia naturaleza sumisa, terca, melancólica, pero muy alegre e impetuosa cuando ve la luz... 




Porque no hay marcha atrás, ni nunca la hubo....




Porque me rendiré ante el rechazo y la decepción, pero me volveré a levantar...




Porque al final solamente, queda reírnos de nosotros mismos disfrutando tanto (o más) de como la vida se ríe de nosotros....


(Me encantan las caras de los "sorprendidos"......)

GRACIAS, por esas manos tendidas..... 
A vosotros os dedico este post.

Mimi

sábado, 14 de diciembre de 2013

Ojalá pudiera rendirme, pero no puedo....

Cuando el dolor es tan punzante que no puedes articular palabra, que no puedes teclear una sencilla frase, que ni puedes verte a tí misma de la cantidad de lágrimas que te desgarran el alma, solamente hay una salida:
Absorver ese dolor, hacerlo tuyo, fundirte con él, amarlo, abrazarlo, asumirlo...

Si se lucha contra él, la batalla está perdida de antemano.

Solamente así, hundida, desmembrada, y rota, reaparece el más puro instinto de supervivencia, y empiezas a darte cuenta de que no puedes hacer nada para matar el dolor.
Solamente te queda un camino: el de aprender y disfrutar.

Porque no tienes nada más...
Porque ya no te queda nada más...

Porque ya no hay miedo...







lunes, 9 de diciembre de 2013

Hasta que no acepte...

Hasta que no acepte que soy única;
Hasta que no acepte que soy especial;
Hasta que no acepte que las heridas no están cicatrizadas;
Hasta que no acepte mis puntos débiles;
Hasta que no acepte que debo ser la primera en quererme y respetarme por todo ello (aún voy demasiado lenta);
Hasta que no acepte que la frase "no quiero hacerte daño", es el dolor es sí mismo;

Hasta que no acepte las consecuencias emocionales del peor episodio de mi vida;
continuaré sintiéndome víctima de abusos...

Hasta entonces, la figura de diferentes caras de mis abusadores y sus actos, reaparecerán una y otra vez en mi vida, quizá para recordármelo...

viernes, 6 de diciembre de 2013

Actores, cine... historias

Mi pasión por el cine viene de la infancia, donde veía plasmada la fantasía que deseaba vivir.
Ya adulta, el cine me acompañó gratamente explicando historias de todo tipo que resonaban en mi: historias de amor y desamor, de tragedias y alegrías, míticas y de leyenda, profundas y superficiales.

Las historias que explicaban los actores en sus películas, las sentía tan reales que inconscientemente creía que las habían vivido.
Pero poco a poco se iban desmitificando, hasta que lo logré por completo cuando conocí a algún que otro actor y algún que otro director profesional. Eran personas, no dioses del glamour o héroes, como imaginaba de pequeña.

Por mucho que las historias que explican son reales, ellos no son los personajes que encarnan. Su compañía se convierte en vacía y efímera en el tiempo. Porque no son reales.

Pero se nos queda en el recuerdo la emoción de lo explicado.
Si queremos, si podemos...

https://www.youtube.com/watch?v=yTN9jn8_FZ0&feature=youtube_gdata_player

El BDSM es real, ¿pero su gente?
En un año me he encontrado tan poca, que los puedo contar con una sola mano sobrándome dedos, y la desesperanza a veces me carcome...

domingo, 1 de diciembre de 2013

Nací sumisa...

Siempre he sido sumisa...
Y ahora sé que en mi intimidad (con un amante), jamás he hablado como una vainilla...
Siempre he hablado como una sumisa, porque es lo que he sentido TODA mi vida, pensando (consciente e inconscientemente), estar hablando con un Dominante.
Estoy convencida que hay quién ha recibido mis mensajes desde su lado más vainilla.
Lo siento, no es mi problema.
Que nadie se olvide (ni tansiquiera yo): soy sumisa las 24 horas del día en mi intimidad, que "juega" (o no hay más remedio) a dominar ciertos aspectos de mi vida, como mi trabajo. Nada más.
No al revés...
Cada día, más orgullosa y segura.
Gracias por vuestros grandiosos apoyos, tanto pasados como presentes.
Mimi